dilluns, 29 de desembre del 2008

PIZZERIA RESTAURANT MORÉ (AMPOSTA-Tarragona-)

La Pizzeria Moré es uno de aquellos restaurantes que si vas, vuelves. Pedro Moré, el propietario, tiene las manos curtidas por el trabajo de toda una vida y la experiencia necesaria para llevar su negocio a buen puerto. El restaurante no es difícil de encontrar, ya que sé halla en la misma entrada de Amposta según llegas desde el interior de la comarca del Montsià. En él caben diferenciar dos partes: la más antigua, donde la familia Moré tiene su residencia en los pisos de arriba y la moderna, ocupando una parte del bloque contiguo. Las dos partes sé comunican por el interior. La primera sé suele utilizar más para grupos y también atienden los encargos; pero no sirven a domicilio. Entre las dos una especie de recepción donde la mujer de Pedo, Angelita (o Geli) y su hijo Àlex atienden a los clientes cuando acceden al local. El servicio es bastante rápido, pese a tratarse de una pizzería y también esmerado. La mayoría de camareros son chicas y chicos jóvenes que atienden con destreza. Un 4,5. La relación calidad preció es muy buena, 4. La carta la componen ensaladas, tapas, platos combinados, pasta, pizzas y los postres. La valoración de la misma seria 3,5. Habrían de mejorar algunas tapas como los calamares o las patatas bravas que sé nota que son productos prefabricados. En el pulpo a la gallega las patatas son cocidas al horno y aunque no están mal, seria preferible que las cocieran junto con los pulpos. Evidentemente, el producto estrella son las pizzas. Hay más de veinte especialidades donde elegir. Algunas de ellas “marca de la casa” como la Montsià, la Mediterránea y la Geli. En cuanto a la carta de vinos, hay que decir que no es muy “larga", pero bastante variada. Un aprobado: 2,5. La carta de postres incluye helados de marca, pero también otras especialices de la casa y es que Pedro, antes de dedicarse al mundo de la restauración era pastelero. También hay gruta del tiempo. Un 3,5. El ambiente del local es muy bueno y la decoración acertada. Hay fotos antiguas de la familia Moré y algún cuadro original, como el Rebull que cuelga en el vestíbulo de entrada. Un 4,5. Los alrededores no son nada del otro mundo. Está junto a un parque que deja mucho que desear, pero es problema del ayuntamiento.

dilluns, 15 de desembre del 2008

UNA ESCAPADA A MIREPOIX (Departamento del Ariège, Francia)

En el Sur de Francia, entre Foix y Carcassonne, a pocos kilómetros de los Pirineos, en pleno territorio cátaro, sé encuentra el encantador pueblo de Mirepoix (unos 3.500 habitantes) Si no fuera por el comercio y los coches, parecería que el tiempo sé detuvo en la Edad Media. Para acceder a la plaza porchada (el centro histórico de la población) sé puede hacer desde diversas calles, pero es aconsejable hacerse pasando la puerta medieval de la antigua muralla. En la plaza, del siglo XI, destacan sus casas de adobe y madera con columnas y vigas de roble, algunas de ellas, como las del hotel Maison des Consuls, representando figuras humanas y animales. Bajo los porches sé encuentra un activo y variado comercio que va desde bares y restaurantes, pasando por tiendas de recuerdos, regalos, librerías, tiendas de ropa, objetos de colección, comestibles, galerías de arte, etc. En un extremo de la plaza sé encuentra el ayuntamiento (Mairie) y en su planta baja encontraremos la oficina de turismo que periódicamente realiza exposiciones. Entre tanta madera, en uno de los lados de la plaza y poca distancia del ayuntamiento, destaca una construcción en hierro forjado sin paredes: es el mercado municipal y justo detrás de él, la majestuosa catedral gótica de San Mauricio (siglos XII y XIII), la segunda más ancha de Europa después de la de Gerona. Con el paso del tiempo, la catedral, perdió su categoría y ahora sólo es una iglesia, aunque perdure el edificio. Justo a su lado, el palacio episcopal, prácticamente en ruinas, con un pequeño jardín. Encontrar alojamiento o un lugar para comer no va a resultar nada difícil. Tiene 4 hoteles y muchos más restaurantes, muestra clara del interés turístico que tiene el pueblo, sobre todo durante los fines de semana y los meses de verano. La fiesta mayor es a finales de julio. Aprovechando el marco incomparable de su plaza, durante el día, hay un bullicioso mercado artesanal. El sábado por la noche sé organizan diferentes funciones teatrales de pequeño formato, haciendo un repaso a través de la historia local en sus diferentes épocas y sus personajes más significativos. Y en la tarde del domingo, una gran cabalgata con caballos y carruajes y multitud de gentío ataviado con indumentarias del pasado más esplendoroso del pueblo. ¿Qué le falta a Mirepoix? ¿Un río? ¿Un castillo? Por Mirepoix pasa el río Hers. Para cruzarlo y entrar en la población según llegas desde Carcassonne, hay un robusto puente de piedra del siglo XIX. Y en lo alto, dominando el pueblo y el valle un castillo que mandó construir Guy de Lévis. No obstante, por ser de propiedad particular, sólo sé puede visitar un día al año, el llamado día del Patrimonio que sé abren las puertas de aquellos edificios cerrados al público. Para llegar, el camino más recto desde España es cruzando los Pirineos por Andorra. Pero también es relativamente fácil hacerlo por el Valle de Arán o Puigcerdá. Por autopista sé puede acceder desde el Mediterráneo (A61), saliendo a Narbonne hacia Toulouse (A66) hasta la salida siguiente de Carcassonne: Brams. Y para los que tengan que desplazarse desde un punto más lejano de España, Toulouse (lo que vendría a ser la capital de la provincia) dispone de aeropuerto.

dimarts, 28 d’octubre del 2008

RESTAURANTE CASA DELS CAPELLANS (TRAIGUERA -CASTELLÓN-)

El pasado domingo, con ocasión de celebrar el 20 aniversario de nuestra boda, mi mujer y yo nos acercamos hasta Traiguera (Bajo Maestrazgo –Castellón-) Mas concretamente hasta el restaurante que está en el recinto del Real Santuario de la Virgen de la Salud: Casa dels Capellans (cuya traducción sería Casa de los Curas) Aprovechando los antiguos aposentos de los curas que estaban a cargo del santuario, desde hace unos cinco años sé ha abierto un restaurante que no desmereció en nada la primera impresión que tuvimos de él la vez que lo “descubrimos” hará cerca de dos años. Lo cierto es que quedamos gratamente impresionados, siendo uno de aquellos restaurantes al que deseas regresar. Al ser domingo, sólo ofrecen uno de los dos menús que figuran en Internet. El jefe de comedor, sudamericano, te explica el motivo y también que durante la semana que no hay tanta clientela ofrecen carta. Los domingos no, ni siquiera carta de vinos, por lo que no entraré a valorar la bodega. La relación calidad precio es muy buena (nota 4,5 sobre 5). El precio oscila entre 30, 35 y 40 euros más IVA, dependiendo si pides ternasco, solomillo o chuletón. Comida: excelente, 5; sé combina la cocina tradicional (asados de ternera, cordero, cerdo, etc.) con toques de cocina más moderna (o de autor). Postres, 5; de elaboración casera, te ofrecen una degustación de repostería con contraste de sabores. Servicio: Muy bueno, 4,5; como me he referido con anterioridad, el “metre”, te da las explicaciones del contenido de los platos del menú y el servicio es rápido y esmerado. Local: muy bien, 4,5; como he dicho sé aprovecharon las antiguas estancias de los curas del santuario, estando perfectamente rehabilitado, incluso dispone de una sala para banquetes y bodas civiles. Decoración: insuficiente, 2; la decoración escasea: un poco más de decoración con elementos antiguos propios del santuario y de la zona, vestiría unas paredes demasiado desnudas. Aseos: Suficiente, 2,5; son bastante espaciosos y sé encuentran limpios. Situación: muy buena, 4,5; situado junto al santuario de la Virgen de la Font de la Salud, a unos 2 kilómetros de la localidad de Traiguera, en plena naturaleza. Cabe destacar que, desde este verano, el santuario sé puede visitar al módico precio de 1 euro por persona.

dijous, 25 de setembre del 2008

EL MAR DEL EBRO (I PARTE) L'AMETLLA, EL PERELLÓ I L'AMPOLLA

L’Ametlla de Mar (para muchos la Cala) todavía conserva el aire de villa marinera y pescadora. Paseando por sus estrechas calles, hablando con la gente, acercándonos al Mediterráneo, nos daremos cuenta de la importancia que tiene el mar para el pueblo. Nada más dejar la autopista, en la entrada de la población, encontraremos una rotonda con una escultura recién inaugurada: “manos y remos”, dedicada a los hombres de la mar. Y para los que pasan de largo, “embarrancada” junto a la AP-7, si sé fijan, verán una pequeña embarcación de las que sé usan para la pesca de la sardina, la captura más típica del lugar. La plaza de Catalunya, donde se concentran un gran número de establecimientos relacionados con la hostelería, será el punto de partida de la visita. Desde allí no será difícil localizar el ayuntamiento y la oficina de turismo situada en los bajos del mismo, en la calle Sant Joan, una de las más concurridas, sobre todo en los meses de estío. Si nos dirigimos hacia el mar, nos sorprenderá el gran balcón blanco que recorre toda la fachada marítima y desde donde podremos contemplar la serenidad del “Mare Nostrum”, el vuelo de las gaviotas y en un día laborable, a primera hora de la mañana y a media tarde, la salida y la entrada de las embarcaciones pesqueras. La falta de edificios significativos la podemos sustituir por pasear por el sendero que recorre la costa (GR-92) contemplando el mar des de sus acantilados, pasando por sus múltiples calas (algunas de ellas bandera azul), como la playa de l’Alguer, en las misma población, o la de Pixavaques, nada más salir del pueblo en dirección N y también las de Calafat, del Vidre, la playa de l’Estany Tort, etc. Continuando en esta dirección llegaremos al castillo de la orden medieval de Sant Jordi d’Alfama que da nombre a una de las urbanizaciones del municipio. Y en dirección al S, la del Bon Capó, la playa de l’Estany o la de l’Àliga. L’Ametlla de Mar está hermanada con Benidorm, otro municipio costero de múltiples calas. Durante el verano sé organizan visitas guiadas por los lugares más históricos y entrañables del pueblo. Es visita obligada el museo de Cerámica Popular situado a unos 3 Km. de la población en dirección a Barcelona, justo al lado de la N-340, en la urbanización de las 3 Calas, que con sus 1.500 metros de exposición y las más de 4.500 piezas expuestas, está considerado el mayor de Europa en su categoría. Son famosas las alfombras de flores que sé confeccionan a lo largo del recorrido de la procesión del día de Corpus Christi. El visitante no puede pasar de largo sin entrar en algún restaurante y degustar una de las cocinas marineras más típicas, siempre acompañadas de dos tipos de salsas: el “all i oli” y la romescu (tradicional de la zona de Tarragona) Durante el año sé realizan 3 jornadas gastronómicas basadas, como es lógico, en las comidas características del lugar. L’Ametlla dispone de todo tipo de establecimientos para hospedarse. Desde el más moderno hotel de cuatro estrellas, hasta campings, pasando por varias casas de turismo rural. Seguiremos hacia l’Ampolla. Para ello deberemos coger la autopista o la nacional en dirección S. Pero el viajero que desee contemplar una de las pocas costas vírgenes, le recomiendo que vaya hacia aquella dirección subiendo la cuesta que sube justo por delante del mercado, en la “otra parte de Cala”. Siguiendo esta calle saldremos de la población y, a poca distancia, encontraremos un pequeño cruce que conduce al hotel de cuatro estrellas, sé seguirá por este camino asfaltado hasta encontrarnos con las playas del Perelló. El Perelló es un municipio del interior por donde antaño pasó la Vía Augusta romana y que siguiendo su trazado nos conduciría hacia Tortosa (la Dertusa romana) pasando por la ermita del Coll de l’Alba. Hace unos años encontraron restos de esta vía en el paraje denominado Coll de les Forques, donde sé erige un monumento en honor de los 13 héroes que en 1640 defendieron el pueblo resistiendo a las tropas reales de Felipe IV. También sé tienen que visitar los abrigos de Cabra Feixet i la cueva de la Mallada con pinturas rupestres de arte levantino (declaradas patrimonio de la humanidad por la UNESCO) Es recomendable visitar los restos de Fullola, un pueblo abandonado que dio origen al pueblo actual, cerca de la carretera que conduce a Rasquera y las fuentes de origen romano al lado de la Vía Augusta. También puede visitarse la ermita de San Cristóbal con una zona de picnic y el molino de viento del siglo XVI. De la gastronomía local destacan las chuletas de “crestó” o cabra blanca que sé cría en su término municipal, sin olvidarnos de la miel, a la que, una de las empresas productoras, ha dedicado un centro de interpretación. En la plaza Lluís Companys, en el mismo corazón de la villa, está situada la oficina de turismo. Encontraremos alojamiento en diversas casas de turismo rural que hay en la población y en su término municipal. Saldremos del Perelló en dirección a sus playas. Como ocurriera en L’Ametlla, aquí, el mar, todavía forma pequeñas calas. Cabe destacar la playa de Santa Llúcia, la cala Buena o la de Morro de Gos. Muy cerca de esta última, durante los meses de julio y septiembre, hay abierto un barracón donde sé facilita información turística. Hacia l’Ampolla podemos seguir sin tener que regresar hasta las dos principales vías de comunicación, siguiendo la serpenteante carretera que algunos ya habrán cogido en l’Ametlla y por la que llegaremos al pueblo, justo al lado de las vías del tren. L’Ampolla, es también un pueblo marinero del que destaca su paseo marítimo con su “fachada” de restaurantes. Parece ser que sus orígenes son de la época de los íberos y algunos historiadores sitúan en este lugar el poblado heleno de Lebedontia. También sus largas playas que contrastan con las calas que habíamos visto hasta ahora (aunque también hay alguna), como Cap Roig, Capelo, de les Avellanes o del Arenal. Alguna de ellas también es bandera azul. La oficina de turismo sé encuentra en el centro neurálgico de la población, en la plaza González Isla. Sé ha de estar atento a las jornadas gastronómicas que sé organizan con degustación de ostras y otros moluscos así como el mercado de la artesanía cada sábado desde principios de junio hasta mediados de septiembre. Para alojarnos podremos escoger entre la amplia oferta de establecimientos: desde un hotel de 4 estrellas y un aparthotel de 3 llaves, hasta otros establecimientos de menor categoría. Durante el verano abre una de las más famosas discotecas de la zona con la característica de estar al aire libre. COMO LLEGAR. Las comunicaciones con estas poblaciones son bastante buenas. Por la autopista AP-7 encontraremos salidas en: L’Ametlla Perelló, L’Ampolla y también en l’Aldea si sé viene desde el S. Así mismo podremos acceder a estas mismas poblaciones por la N-340. Si sé viene desde Zaragoza habrá que coger l’Eix de l’Ebre o la C-12 hasta l’Aldea. En cuanto al tren (línea Barcelona-Valencia), existen estaciones en L’Ametlla y L’Ampolla, aunque solo paran trenes de cercanías. En la estación de referencia del territorio, L’Aldea-Amposta-Tortosa, para el Euromed. Reus, a unos 50 Km., dispone de aeropuerto.

dilluns, 25 d’agost del 2008

M'AGRADA L'ARROSSEJAT

“Me gusta el arrossejat”. Con este lema, que sé podía leer en la espalda de las camisetas de los que colaboraban en la fiesta, L’Ametlla de Mar, municipio marinero por excelencia de la comarca del Baix Ebre, celebro el pasado sábado día 23, con mucho éxito, la XXIV edición de las jornadas de “l’arrossejat”, organizada por el Patronato de Turismo. Sin lugar a dudas, uno de los platos más típicos que solían comer los marineros a bordo de sus embarcaciones cuando salían a pescar. Tal y como informé en mi otro blog (La Via Augusta), tuve el honor de participar de forma activa formando parte del jurado que tenía que escoger a los ganadores. La edición del presente año que estaba patrocinada entre otros por el Periòdic d'Andorra, contó con 52 concursantes, significando todo un record, como lo recordaba en la edición de ayer el Diari de Tarragona. De todos los participantes salieron 6 primeros premios que se llevaban para su casa 150 euros y un trofeo. Además, entre los ganadores, sé sorteo una cena para dos personas en el conocido restaurante de la localidad Mesón ca l’avi Pere y también una estancia de fin de semana para dos personas en un hotel de Andorra, gentileza del Periódico d’Andorra. Había 3 jurados compuestos por 4 personas cada uno que íbamos puntuando las cazuelas con el arroz, tal como nos iban llegando. Cada una de ellas tenía un número enganchado al asa que pertenecía a un determinado concursante. Al haber tantos participantes sé tuvieron que hacer dos tandas. Cada jurado elegía dos ganadores (una por tanda), lo que hace el total de 6. En la primera parte del concurso, un grupo chino de acrobacias nos deleitó con sus contorsiones, sus equilibrios, etc. Además otra pareja de chicas nos interpretó varias danzas de distintos países. Para el público existente, sé repartieron 1.500 raciones de “arrossejat” cocido por un grupo de hombres expertos. También, paralelamente, sé ofrecía a los asistentes la posibilidad de colaborar con la Liga contra el cáncer, la degustación de un plato de mejillones.

diumenge, 10 d’agost del 2008

RESTAURANTE LES PALMERES (Can Clarisa) Sant Carles de la Ràpita

El restaurante Les Palmeres se encuentra al final del paseo marítimo de Sant Carles de la Ràpita, un pueblo que por su turismo y gastronomía no necesita de muchas presentaciones. Para quien no hay estado nunca en este restaurante, si quiere llegar con coche tendrá cierta dificultad. No tanta a la hora de aparcar ya que han acondicionado dos pequeños aparcamientos en las inmediaciones (entre 25 y 50 metros) El restaurante Les Palmeres destaca sobre todo por su privilegiada situación: al lado del paseo marítimo y, evidentemente, a tocar del mar. Dispone de una terraza al aire libre entre el paseo y parte del recito del propio restaurante, ésta última con bar. El comedor es amplio y confortable. Como decoración destacan los motivos marineros (¡Cómo no!) y no es nada recargada. La relación calidad precio es buena: 3,5 sobre 5. Una recomendación: la caldereta de arroz caldoso de bogabante. Comida: sobresaliente 4; excelente cocina marinera; dispone de carta, menú turístico, menú degustación y otros menús con variedad de precios para adaptarse al bolsillo de cualquier comensal; la carta de carnes es escasa. Bebida: bien 3; la bodega es más que aceptable; dispone de una variedad de vinos de distintas zonas vitivinícolas de España y, como no, también de nuestra tierra (Terra Alta, Montsant, Penedès, Priorat, etc.) i también cavas. Postres: bien 3; no facilitan carta y es el camarero el que te la va “cantando”; tienen un excelente sorbete de piña i también de limón, además de crema catalana (sé supone que casera) y helados. Amabilidad: 3; esta faceta sé centra demasiado en el buen quehacer de los camareros, los dueños, a parte de tomar nota, brillan por su ausencia, creo que es un detalle que deberían cultivar. Comedor: notable 4; como ya he dicho es amplio y cómodo y además preparado para hacer cualquier tipo de acontecimientos (bodas, banquetes, etc.) Aseos: 4; son suficientemente grandes y están limpios. Instalaciones: sobresaliente, 4,5; el restaurante no tiene demasiados años y en él no se aprecian desperfectos. Entorno: excelente 4,5; sin duda y como ya he dicho también, una de las principales cualidades del restaurante, sobre todo para aquel de tierra adentro que no está acostumbrado a ver el mar y menos a comer junto a él.

dimarts, 24 de juny del 2008

RESTAURANTE L’ESTANY (la Casa de Fusta) AMPOSTA (DELTA DEL EBRO)

Este restaurante se encuentra ubicado en el corazón del Delta del Ebro entre la carretera que va desde Sant Jaume d’Enveja a Sant Carles de la Ràpita y el Poble Nou del Delta, justo al lado de la laguna de la Encanyissada y la “Casa de Fusta”, un museo ornitológico perteneciente al Parc Natural del Delta de l’Ebre. Los propietarios del restaurante son Lluís García y su mujer Elísabeth Bo . Ella es la responsable de la cocina y él es el “maestro de ceremonias” del comedor y de “lo que haga falta”. El restaurante fue pionero en recuperar tradiciones que iban desapareciendo en el delta con el paso de los años y la llegada de las máquinas. Así, antes de que empiece el verano lleva a cabo la fiesta de la plantada del arroz como sé hacia antaño: a mano. Y cuando llega el otoño, una vez el ciclo del arroz ha acabado, sé realiza la fiesta de la siega. En ambas ocasiones sé acompañan de una serie de actos lúdicos para el goce del público asistente: jotas tradicionales del Ebro en vivo, paseos en carro de caballos, degustación de delicioso coc (una especie de bizcocho) acompañado de moscatel, etc. En el restaurante se sirve comida típica del Delta del Ebro, pero también podemos encontrar sabrosos platos de carne y pescado. Entre la cocina típica del Delta sé puede destacar los arroces (arrossejat, negro, paella marinera, arròs fesols i col...) También ancas de rana huevas de carpa (como si fuera caviar), anguilas, ortigas, etc. La relación calidad precio es excelente, 5 sobre 5. La comida: excelente, 4,5; existe una variada carta tanto de carnes y pescados como mariscos, etc., hay algunos postres de confección casera como la típica crema catalana, el menjar blanc, variedad de bizcochos, flanes...La bodega: sobresaliente, 4, aunque no muy extensa tiene variedad de vinos de la mayoría de zonas vinícolas de Catalunya y también riojas, somontanos, etc. y algunos cavas. Servicio: excelente, 5; cuenta con un extraordinario grupo de profesionales entre los que destaca Paco, el más veterano y que domina a la perfección el arte de servir y tratar a los clientes. Amabilidad: excelente, 5; quizás lo que más destaca de los que integran el restaurante, nadie queda ajeno de las explicaciones y recomendaciones, sobre todo por parte del anfitrión; Lluís puede explicar desde los ingredientes del plato que sé ha servido hasta los más íntimos secretos del delta. Instalaciones: sobresaliente, 4,5; el restaurante sé renovó hace un par de años y lo cierto es que además de capacidad, ganó en estética; es un restaurante que reúne la mayoría de las comodidades que suele buscar el cliente. Decoración: Excelente, 5; mayoritariamente lo decoran estampas típicas del Delta del Ebro, pero también cuadros de pintores actuales; sobre todo quiero destacar las de las cristaleras. Exteriores: excelente, 5; su ubicación es ideal, ya que nos encontramos en medio del Delta del Ebro con sus paisajes, flora, fauna y las grandes posibilidades que tenemos para hacer un turismo de calidad; en cuanto a los exteriores del restaurante tiene un jardin con un pequeño zoologico con algunas aves, la mayoría de la fauna autóctona y columpios y otras atracciones para el disfrute de los más jovenes. Pero el Restaurante l’Estany dispone además de otros servicios. Con la otra empresa (lo Mas de la Cuixota) sé puede disfrutar de otras actividades turísticas como alquiler de bicicletas y tándems, embarcaciones de perchado, zona de pic-nic, etc. Es uno de los restaurantes que no debería faltar en la agenda de ningún visitante.

dilluns, 5 de maig del 2008

RESTAURANTE CAN LLUÍS. EL PINELL DE BRAI (TERRA ALTA)

Es la segunda vez que voy a este mesón brasería. Es un restaurante rústico con todos los ingredientes típicos y alguno más. Jamones colgados en un lateral y que se pueden comprar, columnas de ladrillo, vigas de madera, pared de detrás del mostrador de piedra (o imitación), chimenea para asar la carne. La relación calidad precio es buena (3) Comida: 2,5; solamente carne a la brasa (chuletas, longaniza, churrasco y manitas de cerdo, etc.); el postre es, mayoritariamente helado, aunque también puedes hacer músicos (surtido de frutos secos acompañados de vino dulce) Bebida: 1,5; muy poca variedad de vinos y sólo un cava; los vinos que se ofrecen son de la Terra Alta, comarca a la que pertenece el pueblo. Instalaciones: 2,5; si tenemos en cuenta del tipo de restaurante que se trata, tampoco vamos a pedir más... Aseos: 1; totalmente insuficientes y no adaptados para personas con minusvalía; son pequeños, supongo que para aprovechar más el espacio del comedor, hasta el punto que para poder cerrar la puerta has de colocarte al lado del w.c. Servicio: 2; el trato, aún siendo correcto, no sé hace merecedor de una mejor puntuación, ya que en ningún momento muestran algún detalle hacia el cliente. Entorno: 2,5; el pueblo del Pinell dispone de pocos lugares verdaderamente interesantes, sin duda, el mejor, la bodega cooperativa de César Martinell y también es aconsejable el centro de interpretación de “las Voces del Frente”, sobre la prensa y propaganda de la Batalla del Ebro.

divendres, 2 de maig del 2008

RESTAURANTE MARISOL. ELS VALENTINS (ULLDECONA)

Cabe decir que el restaurante Marisol, en els Valentins (Ulldecona), también conocidos popularmente como “els Masets”, es uno de aquellos restaurantes que suelo visitar de cuando en cuando. De muy joven acudía con los amigos a comer conejo, quizás el plato más típico del lugar. Recuerdo con especial cariño un año que pasábamos por allí para tomarnos el “carajillo” y después ir a bailar al carnaval de Godall. No nos venía de paso ni mucho menos, pero… Es un restaurante familiar que data de 1927 del que he conocido a las dos últimas generaciones y desde que lo lleva Marisol, “la hija”, con su marido, lo cierto es que el restaurante ha ganado muchísimo. La reforma que hicieron hace algunos años le dio una forma de restaurante rústico, a la vez que tiene aires de moderno. La combinación no está nada mal. Quizás para el cliente que acude por primera vez, lo que sorprende son los enormes puzzles con los que se decoran las paredes. No sé las piezas que tendrán, pero miles y algunos miles más los de mayor tamaño; reproducen cuadros de la pintura clásica i hasta un reloj de péndulo que, seguramente, si tuviese pilar marcaría la hora en punto. La relación calidad precio es alta 4. La carta, basada sobre todo en la carne, es variada y sugestiva y la carta de vinos bastante completa, pero quizás un poco cara. Comida: 4; los platos son bastante abundantes, sabrosos y bastante bien presentados con acompañamiento adecuado y el dueño te ayuda en la elección, por lo que también es una cosa a valorar; tiene postres de la casa como flan de huevo o crema catalana. Bebida: 3,5; creo que deberían tener más vino del país D.O. Terra Alta, Montsant, Priorat…, pero es bastante variada. Instalaciones: 4,5; es un lugar donde te sientes cómodo, quizás al entrar parece que tiene una excesiva decoración, pero cuando ves de que se trata, aprecias el trabajo de la dueña en su confección; la chimenea siempre es un elemento que valoro de forma considerable. Aseos: 3; no son muy amplios, pero están limpios y, además adaptados para la gente que tenga la movilidad reducida Servicio: 4; como ya he dicho, el dueño, que es el que toma la nota te aconseja sobre la idea que tu llevas y se muestra amble y servicial. Entorno: 2,5; els Valentins está cerca y lejos de todo, según como sé mire. Al tratarse de un barrio, prácticamente no tiene elementos de interés, pero a unos 10 kilómetros podremos adentrarnos en la Tinença de Benifassà y más o menos a la misma distancia encontraremos Ulldecona, con todo el atractivo que tiene esta población del S de Catalunya. El Parc Natural dels Ports también sé encuentra a una distancia similar.

dijous, 1 de maig del 2008

RESTAURANTE EL RACÓ. MAS DE BARBERANS

La de ayer era una comida programada. Quiero decir con esto que la habíamos contratado de antemano. Fuimos un grupo de compañeros de trabajo. Normalmente, por estas fechas, siempre solemos acudir al Mas de Barberans, el pueblo más alto de la comarca del Montsià aprovechando que son las fiestas mayores y que, además, trabaja un compañero de este pueblo y que ahora es el alcalde. Por lo tanto mi valoración será de lo que se puede valorar; omitiendo, por ejemplo, la carta de vinos. La relación calidad precio es aceptable. Nos costó unos 28 €, pero la comida fue abundante y rica. Valoración. Comida, 3,5; muy basada en la carne, aunque según informaciones, el ternasco, el plato más típico del Mas de Barberans, no les sale tan bueno como en el otro restaurante de la localidad; hay también algún plato de pescado y la presentación, en general, está bastante bien. Postre, 4; tiene postres de elaboración casera como la crema catalana y el “menjar blanc”, postre lácteo de crema de arroz muy típico de esta zona. Instalaciones, 3,5; no muy amplias, pero se nuevas y con una decoración bastante acertada, quizás la música que suena para dar ambiente debería estar mejor seleccionada. Aseos, 3; suficientes, pero un poco apartados del comedor y compartidos con el bar. Amabilidad, 4; tanto el dueño como el camarero se mostraron amables y serviciales durante toda la comida. Entorno, 4,5; sin duda lo mejor, el restaurante está situado a la salida de la población pero desde el “balcón” de enfrente se divisa toda la llanura de la Galera con la montaña del Montsià al fondo i también se puede ver un cachito del Mediterráneo; no muy lejos se puede acceder al Parc Natural dels Ports y subir siguiendo el curso del barranco de la Galera y visitar lugares tan magníficos como el “Racó dels capellans” y más arriba “la Cova del vidre” o “Casetes Velles”.

dimarts, 15 d’abril del 2008

LOS PUEBLOS SIN LÍMITES: ARNES, BECEITE Y VALDERROBLES

Vamos a visitar una zona a caballo de las provincias de Tarragona y Teruel, donde suS habitantes no entiende de límites territoriales. Los pueblos, el paisaje y el carácter de la gente son muy similares. También comparten idioma y costumbres. El viajero que llegue hasta allí, difícilmente, podrá adivinar si está pisando territorio de Aragón o bien de Catalunya. El recorrido lo haremos por los municipios de Arnes, Beceite (Beseit) y Valderrobles (Vall-de-roures) El término municipal de Arnes (colmenas, en castellano) limita con el de Horta de Sant Joan (cuya ruta ya fue propuesta hace escaso tiempo) Como vecinos, comparten diversas cosas: los Ports de Tortosa-Beseit y los ríos Estrets y Algars. Llegaremos a Arnes desde Horta y entraremos en la población. El pueblo es pequeño (algo más de 500 habitantes) Lo primero que nos sorprenderá es su estructura medieval, con bastantes arcos, restos de muralla y algunas casas con balcones de piedra que revelan un pasado lleno esplendor. Paseando por sus estrechas calles nos sentiremos como transportados al siglo XVI. Podremos adquirir productos típicos en las agro tiendas y pastelerías. Finalmente llegaremos hasta la plaza Mayor, el lugar más interesante del pueblo. Destacan las iglesia y sobre todo el ayuntamiento (s. XVI), un recio edificio renacentista. Desde el balcón situado a un nivel inferior al resto de la plaza nos deleitaremos con la vista de los Ports y las ya conocidas Rocas de Benet. El Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya lo declaró conjunto histórico en 1992. Cerca del ayuntamiento hay un antiguo molino (el Molí) que hace a su vez de oficina de turismo. Arnes dispone de varias casas rurales y unos apartamentos de lujo para los más exigentes. Abandonaremos Arnes con dirección a Valderrobles. En el lecho del río Algars, a la derecha, veremos la ermita de Santa Madrona y una zona de pic-nic. En el cruce antes de llegar a Valderrobles, giraremos hacia la izquierda para dirigirnos a Beceite (de origen musulmán, no llega a los 700 habitantes) Entraremos por un viejo puente de piedra del siglo XV sobre el río Matarraña. Junto al puente, todavía en el “barrio nuevo”, la ermita de Santa Ana (s. XVII) Nada más cruzar el puente, que se construyó para salvar la enorme altura que tiene allí el río Matarraña, a mano izquierda, nos encontraremos con un portal sobre el que está el escudo del pueblo. Siguiendo la calle, de las pocas llanas que tiene, daremos, con los que son, sin duda, los dos restaurantes más típicos. Caminaremos ascendiendo por las encrucijadas calles, pasando por debajo de varios arcos (como el de S. Roque) hasta llegar a la iglesia de San Bartolomé (s. XVIII) y justo al lado, el ayuntamiento. A partir de aquí empezaremos a descender. Nada más salir de la plaza de la Constitución, a la izquierda veremos los arcos de la lonja y un poco más abajo, también a la izquierda el lavadero público, donde antaño iban las señoras a lavar la ropa y, de paso, hablar de los últimos chismorreos. Saldremos del pueblo por el mismo lugar que habíamos entrado y si cogemos la calle de la izquierda nos llevará hasta las “gubias del Parrizal” espléndido paraje natural que sigue el curso del río y que sé puede remontar sin demasiados problemas al principio, pero después sólo los más intrépidos y dispuestos a bañarse podrán llegar hasta la Font del Teix. Antes de llegar al Parrizal, a la derecha, justo al lado del río, hay una zona de acampada. Además del río Matarraña, en su término municipal encontramos tres ríos más: el Algars, que lo separa de Arnes, el Ulldemó y el de Pena, con su pantano. En su término municipal también hay pinturas rupestres de arte levantino. Beceite dispone además dos hoteles y varios alojamientos rurales. Saldremos de Beceite por la carretera de Vallderobles (por donde habíamos entrado) Al llegar al cruce iremos hacia la izquierda y encontraremos enseguida esta población (unos 2.000 habitantes), también bañada por el Matarraña. Tendremos la opción de seguir y entrar en el casco viejo (donde nos será más difícil aparcar) o por el puente de hierro dirigirnos hacia la parte nueva de la ciudad, donde hay un hotel y varios restaurantes y a poca distancia la oficina de turismo. Entraremos en el casco antiguo por el puente de piedra y cruzaremos el arco de entrada, flanqueado por dos leones (una de ellos decapitado). A la izquierda encontraremos el majestuoso ayuntamiento renacentista con una lápida de mármol que anuncia la visita que efectuaron los Reyes en el 2002. Y a la derecha, la fonda de la Plaza, una de los establecimientos de este tipo más antiguos de España. La plaza Mayo de Vallderrobles tiene además otros edificios nobles dignos de observar. Después nos dispondremos a subir hacia la parte alta del pueblo para visitar la iglesia y el castillo. Es igual que cojamos las escalinatas de la izquierda como la calle empinada de la derecha. Antes de llegar a los más alto pasaremos por estrechas callejuelas y empinadas escaleras. Una vez arriba encontraremos la solemne iglesia de Santa María la Mayor (ahora en reconstrucción) de estilo gótico aragonés (s. XIV y XV) y el castillo del obispo (declarado monumento nacional en 1931) Al bajar, podremos tomarnos un refresco en el bar de la plaza, tranquilamente sentados, volviendo a contemplar sus monumentos, mirando de no dejarnos detalle, mientras comentamos el encanto de los pueblos visitados donde, al parecer, el tiempo dejó de transcurrir hace ya bastantes décadas.

diumenge, 13 d’abril del 2008

RESTAURANTE LA FONT DEL PAS. BECEITE (MATARRAÑA -ARAGÓN-)

Cuando a alguien de nuestras tierras le hablas de comer en Beceite (Beseit), lo más seguro que te pregunte si vas a comer a casa de la Sra. Cinta. Pero antes de entrar en el pueblo hay un antiguo molino harinero del siglo XVIII que ha sido restaurado para albergar un hotel y un restaurante: La Font del Pas. Nada más llegar impresiona ver la enorme edificación magníficamente restaurada y con detalles que sorprenden los ojos del viajero: flores, fuente, etc. Y por supuesto el río Matarraña que corre sin prisa pero sin pausa al lado mismo del complejo. Dejamos el coche en la zona de aparcamiento habilitada y nada más bajar nos encontramos con los dueños (Ramón y Maria Ángeles) paseando tranquilamente antes de ponerse a servir las mesas a la hora de comer. Al llegar al interior, lo que ves no te defrauda: un pequeño saloncito amoblado con gusto y con fotografías antiguas del pueblo y otros objetos de decoración. El comedor es pequeño pero espacioso (no es de aquellos que para que pasen los de la mesa de al lado has de levantarte tú) Y justo al lado hay otro comedor separado por una gran puerta con cristaleras, por lo que, en casos de necesidad se puede ampliar sin demasiados problemas. Una chimenea “preside” el comedor. La relación calidad preció es muy buena, 4,5 (sobre 5), 22 euros el menú sin incluir el vino y los cafés. Comida: muy buena, 4,5.; la carta no es muy amplia pero lo que tuvimos ocasión de probar estaba delicioso; caben destacar los postres caseros y variados. Bebida: aprobado, 2,5; lo cierto es que no vimos la carta de vinos, de entrada te ofrecen el “vino de la casa” que está bastante bien, aunque se desconoce el origen, pero se supone que es de la zona; como vimos que en otras mesas ofrecían. Servicio: muy bueno, 4,5; se nota que lo hacen todo la familia, pero son rápidos y serviciales. Instalaciones: excelente, 5; la restauración es magnífica, la decoración esmerada y a tono con el tipo de instalación y el lugar. Aseos: Excelente, 5; amplios y limpios; el detalle de que la luz se encienta al entrar es una forma de ahorrar energía, pero habría que llevarlo también a los grifos de agua. Entorno: magnífico, 5; junto al río, rodeado de naturaleza, cerca de un pueblo encantador y con muchas posibilidades para disfrutar de la naturaleza.

dijous, 10 d’abril del 2008

RESTAURANT L'EMBARCADOR. GARCÍA

El Restaurante l’Emabarcador de García (Ribera d’Ebre) es uno de aquellos restaurantes que te sorprende: por su situación privilegiada al lado del río Ebro, pero sobre todo por su construcción, toda de madera. Está situado en la carretera de Móra la Nova a Garcia, al lado izquierdo de la carretera y un poco alejado de la misma, a 1 Km. antes de llegar a Garcia. Una vez dentro de él, no te defrauda, la decoración está de acorde con la construcción (quizás un poco más marinera que fluvial). Tiene encanto. La relación calidad precio quizás sea lo peor del restaurante. La comida es excelente, pero el precio es un poco elevado (unos 50 € por persona), así que de nota un 2. Comida: muy bien, 4,5; no la califico de excelente porque la carta, quizás sea un poco corta; pero variada, arroces, carne, pescado y buenos postres caseros con una presentación excelente. Bebida: muy bien, 4,5, diría lo mismo que la comida, quizás la carta de vinos se queda un poco corta. Servicio: muy bien, 4,5; es esmerado y trato amable. Instalaciones: extraordinarias, 5. Servicios, extraordinarios, 5. Decoración interior: excelente, 5. Entorno: excelente, 5. La entrada está adaptada para discapacitados.

dimecres, 9 d’abril del 2008

RESTAURANTE LA TANCADA. POBLE NOU DEL DELTA (AMPOSTA)

Carpaccio de peus de porc amb llagostins.
El Restaurant la Tancada se encuentra situado cerca de la laguna de su mismo nombre, en el corazón del Delta del Ebro, muy cerca del núcleo del Poble Nou (Amposta) Es además camping. La cocina es la tradicional del Delta: arroces, pescados, mariscos, anguila… Tiene dos comedores. El interior donde no se permite fumar y el exterior, una especie de terraza cubierta que además de fumar permiten la entrada de perros. Posee una amplia zona de aparcamiento. Entrantes (pulpo a la gallega, chipirones, calamares a la romana, carpaccio de gamba, almejas, mejillones, etc.) diversas variedades de arroz (en los dos últimos años Pepe ha conseguido que uno de sus arroces se situe en lo más alta de los mejores arroces del delta del Ebro) y postres sale por unos de 25 € por persona.
Después de unos años de trotamundos adquiriendo experiencia como cocinero (en París estuvo en un restaurante con una estrella Michelin), Xavi, el hijo menor, ha vuelto al restaurante de la familia para darle un nuevo impulso. A partir del mes de febrero de 2016 sus creaciones compartirán la carta tradicional. También piensa ofrecer un menú para vegetarianos.
Las fotos que acompañan este escrito ya son creaciones de chef Xavi Montañés.
La relación calidad precio es muy buena. Comida: excelente, 5, destacan los arroces, pero últimamente también los postres de creación propia. Bebida: insuficiente, 2; la carta de vinos y cavas es insuficiente. Amabilidad: Sobresaliente, 4,5; igual el dueño como la dueña suelen pasar para preguntar si la comida ha sido de la conformidad de los comensales y Josep, el hijo mayor que hace las funciones de jefe de sala es muy servicial y está siempre dispuesto a explicar los pormenores de cada plato. Instalaciones: Aprobado, 2,5; no son muy amplias y normalmente el espacio entre los comensales suele ser mínimo. Servicios: Suspenso, 2, sin duda alguna uno de los aspectos a mejorar. Decoración: notable, 4; muy acorde con el entorno con motivos del Delta y también de la comarca del Montsià. Entorno: magnífico, 5; se puede disfrutar de la tranquilidad del Delta y de su cromática, distinta según la época del año y del estado de los arrozales (si se acaba de plantar, si se está a punto de recolectar, etc.); Se pueden ver muchas especies de aves y no muy lejos (unos 15 minutos andando), en la laguna de la Tancada y con prismáticos se pueden ver patos y flamencos.
Otro de los aspectos a mejorar es que la parte interior debería ser accesible para personas con problemas de movilidad y no solo la parte exterior.

Pulpo a 'baja cocción'. 

Cordero a 'cocción lenta' (8 horas) 

Sorbete de mandarina

dissabte, 22 de març del 2008

RESTAURANTE CAN BARRINA. ARNES

Encontrar una marisquería en plena montaña (els Ports de Tortosa Beseit) no suele ser habitual. Pero Can Barrina combina lo mejor de la mar (del puerto de Sant Carles de la Ràpita) con lo mejor de la montaña. Así en su variada carta nos podemos encontrar con unos calamares a la romana elaborados en la cocina del propio restaurante, unas gambas rojas o unos caracoles de mar y también con un “cibet de jabalí” (carne que antes de ser elaborada se deja descomponer un poco hasta el punto exacto –es un plato difícil que se encuentra en muy pocos restaurantes), un entrecot al roquefort, a la pimienta verde o simplemente a la brasa o unas costillas de cordero, también a la brasa. En el apartado de entrantes cabe decir que son variados y autóctonos: escalalivada de bacalao (es una ensalada con tomate y aceitunas del terreno), judías secas (blancas y negras) con longaniza, ensaladas, entremeses, etc. Y en el apartado de postres cabe destacar el músico (postre de frutos secos –sobran los pistachos) que se sirven acompañados de una copita de moscatel), muy tradicional de Catalunya. La relación calidad precio es buena 4 (sobre 5) (unos 20 euros por persona, siempre que no sé pida pescado) Comida: notable, 3,5. La mayoría de acompañamiento es en conserva y las patatas fritas, congeladas. Bebida: insuficiente, 1. No dudo que exista carta de vinos, pero no va con la carta y tampoco la trajeron. Servicio: deficiente, 1. Al ser Viernes Santo el comedor estaba muy lleno, incluso se hicieron dos turnos. El personal era insuficiente (para días así habría que contratar más personal) y tardaron una eternidad en servir. Amabilidad: insuficiente, 2. Se supone que debido a la multitud de gente y al exceso de trabajo. Al terminar de comer, el dueño Lluís Borrull, a invitación nuestra nos habló de su afición a la caza y de los problemas que tuvo a la hora de servir cabra hispánica cazada legalmente de la reserva dels Ports. Instalaciones: insuficiente, 2. Haría falta una pequeña remodelación. Han quedado un poco anticuadas. Aseos: aprobado, 2,5. Decoración: aprobado, 2,5. “Luce” varios trofeos de caza, cobrados por el propietario, No hay ninguna referencia al mar. Entorno: notable: 3,5. La población de Arnes merece una visita. Destaca el ayuntamiento renacentista, varias casas y sus portales.

dijous, 13 de març del 2008

HORTA DE SANT JOAN: PICASSO EN EL RECUERDO

A Pablo Picasso, el pintor malagueño considerado como uno de los artistas más grandes de la historia, se le atribuye la siguiente frase: “Todo cuanto sé, lo aprendí en Orta”. Horta de Sant Joan, también conocida como Orta, es un pequeño municipio de la Terra Alta (unos 1.300 h.), comarca catalana limítrofe con Aragón, que ha sabido sacar provecho de las dos ocasiones en que. Picasso estuvo en este pueblo. En la primera de ellas (junio de 1898-febrero de 1899), el pintor, llegó de Paris para recuperarse, ya que había enfermado de escarlatina, de la mano de su amigo Manuel Pallarés, hijo de una familia del pueblo. En verano de 1909 volvería por segunda vez, aunque su estancia fue mucho más corta. Sé dice que en Horta creó el “cubismo”, quizás su estilo más representativo. Una vez hayamos llegado a Horta, para orientarnos, accederemos a la plaza de Catalunya. Des de allí podremos seguir los carteles indicadores que nos llevaran a los distintos lugares de interés que visitaremos. El pueblo dispone de la mayoría de servicios, pero además tiene: naturaleza en abundancia, arquitectura, arte y gastronomía. Pocos pueblos pueden presumir de tener tres ríos. Horta de Sant Joan los tiene: el Canaleta, el Algars y el Estrets. Allí está ubicada la sede del Ecomuseo de los “Ports de Tortosa Beseit”. En su casco antiguo nos encontraremos con una plaza porchada, un edificio del ayuntamiento renacentista y la iglesia de San Juan Bautista, del siglo XII. Y a unos 2 Km. escasos de la población el convento franciscano de San Salvador (conocido también como el de N.S. de los Ángeles), en la montaña de Santa Bárbara, de estilo románico tardío (s. XIII) En cuanto a los espacios naturales, los más significativos son el paraje de “les Olles” en el río Canaleta y el río Estrets. Además tiene un árbol monumental catalogado: “El Parot” (el Padrazo en castellano), un olivo bimilenario, difícil de encontrar por la inexistencia de indicaciones. Punto y aparte merece el Centro Picasso, ubicado en un antiguo hospital del siglo XV. Aquí podremos seguir con detalle los dos viajes que realizó el pintor a la población, los lugares que pintó y las reproducciones de los cuadros con motivos locales, como era la gente del pueblo en aquella época, etc. Pero no encontraremos originales del autor. La población dispone de hotel, casas de turismo rural y otros alojamientos. Cuando se habla de restauración, Horta, tiene un nombre propio: Miralles. Es la primera ocasión que en mis escritos doy el nombre de un restaurante, pero creo que, en este caso, lo tiene bien ganado. Pero Miralles, que tiene varios establecimientos dedicados a alojamiento y restauración, además de otras actividades recreativas, no es el único restaurador del pueblo. Saliendo con dirección a Bot podemos encontrarnos con otros restaurantes, dentro del pueblo y en la carretera. Horta de Sant Joan es para disfrutarla con tranquilidad. Para coger la bicicleta y hacer recorridos por la Vía Verde (antigua línea férrea de la Val de Zafan que unía Aragón y Catalunya) coger la carretera de los “Estrets” y adentrarse en el parque natural donde divisaremos las imponentes Rocas de Benet. Cerca del río hay una zona de barbacoas y acampada. La mejor época para visitar este municipio es en primavera, donde la naturaleza luce con todo su esplendor. El contraste entre las montañas y los valles y la diversidad cromática sorprenderá nuestra vista. Quiero permitirme nombrar a uno de los personajes más interesantes del pueblo, Salvador Carbó, impulsor del Centro de Estudios de la Terra Alta, responsable del Centro de Documentación del Ecomuseo y autor de un estudio sobre la toponimia local y una guía del municipio y premio RECERCAT 2006. Para terminar un dato poco conocido: el abuelo materno del gran locutor radiofónico y presentador televisivo Iñaqui Gabilondo era hijo de Horta y se apellidaba Pujol.

dilluns, 3 de març del 2008

RESTAURANTE MAS DEL CIGARRER D'HORTA DE SANT JOAN

Avui començo un apartat nou: el de crític gastronòmic. La veritat és que m’ha sortit així, de sobte. Hi tot ha segut a una experiència agredolça que hem tingut la meva dona i jo. Feia temps que volia visitar el Restaurant Mas del Cigarrer d’Horta de Sant Joan. El podeu trobar a la Carretera que uneix Bot amb Horta, més prop del primer poble que del segon. Si el busqueu a Internet (http://www.masdelcigarrer.net/home.html), la veritat, el que allí llegireu resulta del tot suggeridor. Tinc que dir que el meu primer intent d’anar-lo a provar va ser el mes de gener. Vaig trucar i vaig parlar amb la que suposo era la mestressa del restaurant. Em va dir que feia dos anys que estava obert i que era el primer cop que havien tancat quinze dies. Em va recomanar anar-hi cap a la primavera que tot estaria més verd i bonic. La veritat és que em vaig emportar una bona impressió d’ella. Divendres passat vaig trucar per encarregar taula per a dos i em va contestar, primer una dona (em va parèixer jove) que va passar el telèfon a un home. No va ser desagradable, però tampoc gens simpàtic. Aquest matí ens hem presentat a dinar. El que suposadament era l’amo, abans de donar-nos els bons dies, d’una manera poc afable, ja ens ha dit que no deixéssim el gos solt. No era la nostra intenció. Després de més d’una hora de camí, li volíem donar una mica d’aigua i que estirés les potes. Una vegada dintre del restaurant, pressa per atendre’ns, tampoc és que l’hagin portat. Finalment ha sortit una dona estrangera i li he dit que teníem taula reservada. Malgrat això, ens ha donat a triar. Ja seguts, ens ha portat unes olives i uns talls de fuet per anar picant i, immediatament les cartes. Hem anar directes als suggeriments del dia sense parar atenció a la resta de la carta. Us prometo que a partir d’ara hi pararé més comte. Com a la pàgina web parla de plats abundants, hem demanat una xató per a compartir i mentre la meva dona s’ha demanat uns xurrasco, jo li he demanat unes galtes de porc al forn amb bolets. L’amanida era per a un. O sigui, una mica curta. Els altres plats estaven prou bé. Hem demanat un vi de la Terra Alta, de Batea concretament. La carta de vins és prou extensa per a un establiment d’aquesta categoria i predominen els vins de la comarca. Els postres són originals i alguns d’ells combinats amb licors. Hem repetit de cafè i als segons li he demanat el compte. Li he tingut que demanar per segon cop. La mestressa en cap moment s’ha dirigit a nosaltres. Al sortir hem amollat a la gossa i amb ella hem donat un tom pel recinte per a fer unes fotos. A la part de dalt, la que dóna a la carretera, hi ha un arc i l’accés a les edificacions (l’aparcament i l’entrada al restaurant són per baix) Una cadena indica “privat”. No obstant, estava llevada i he entrat a fer fotos i a acaronar un pastor alemany que bordava a la nostra gosseta. Ha tornat a sortir l’amo i amb cara de pocs amics i paraules poc simpàtiques ens ha preguntat si la cadena estava llevada, a la qual cosa li hem contestat afirmativament i l’ha posat. M’ha donat la impressió que aquest “senyor” només està per controlar les instal•lacions. Pareix més un guarda de seguretat que un amfitrió. Valoració (sobre 5): Preu qualitat: Acceptable 3,5 (57 euros els dos incloent-hi dues cerveses) Menjar: Bé 3,5. Potser t’esperes una mica més... Veure: Bé 3,5. Amabilitat: Suspens 1,5. És l’assignatura pendent. Suposo que no tracten a tothom igual, però un dia com avui que no hi havia massa gent, haurien pogut fer un esforç de saludar la clientela, cosa que no han fet. Instal•lacions interiors: Prou confortables 3, encara que hi ha alguna taula en poc espai. Lavabos. Per la capacitat potencial justos 1,5. Decoració: Adient 4. Hi ha quadres amb bitllets antics i diversos objectes ara en desús. També hi ha una exposició permanent de fotografia de la que pots comprar-ne còpies. Entorn: Suspens 2. No et donen llibertat per a visitar-lo i des de diverses taules es poden veure els contenidors d’escombriaires. Hi ha alguna planta seca.